Receta secreta: Jabón Verde
Esta vez os presento una receta de jabón específico para el afeitado, y se trata de jabón duro, en pastilla.
También se puede hacer una variedad más blanda, sustituyendo parte de la sosa cáustica (NaOH) por potasa cáustica (KOH), pero no tengo práctica con la potasa, y el jabón duro se ha usado desde hace muchísimo tiempo para el afeitado, con ayuda de una brocha adecuada (se pueden comprar en cualquier droguería o supermercado).
En realidad cualquier jabón sirve para afeitarse, sobre todo jabones con abundante espuma compacta; pero este tiene dos particularidades que lo hacen especialmente indicado:
- Aceite de ricino: se trata de uno de los pocos aceites que contienen ácido ricinoléico, que al saponificar es capaz de formar una espuma espesa y que tiene fama de humedecer (y ablandar) bastante bien la barba. De hecho el ricinoléico compone el 80-90% de los ácidos grasos de este tipo de aceite.
- Arcilla: proporciona al jabón cierta propiedad «resbaladiza», para que las cuchillas deslicen mejor. También seca un poco la piel, así que se puede variar la cantidad si se tiene piel grasa (como en mi caso), o piel seca. He usado arcilla verde, que es la que tenían en la tienda, y también tiene buena fama para pieles grasas (para pieles normales o secas dicen que va mejor el caolín, o arcilla blanca, pero no se si es cierto o no).
Por lo demás, se trata de un jabón corriente, aunque comparado con mis recetas habituales tiene una proporción superior de aceite de coco (abundante espuma) y aceite de palma (espuma estable y cremosa), lo cual también ayuda a conseguir un jabón más firme y con menos tendencia a absorber mucha agua y deshacerse. Por supuesto, la mayor proporción de aceite (40%) es el de oliva, que utilizo siempre como aceite base.
Esta vez también he añadido aceite esencial de lavanda; la proporción habitual para esta cantidad de jabón serían unos 30 ml, pero he añadido sólo 20 ml porque no me gustan las fragancias fuertes, y mucho menos en el afeitado diario. El aceite esencial es opcional, y la verdad es que por aquí es bastante caro (tanto como 20 euros por 10 ml) aunque en tiendas online se puede encontrar por precios muchísimo más bajos. En todo caso, debe ser aceite esencial puro de lavanda (Lavandula angustifolia), y no productos como los que se utilizan para quemadores de aromas, etc. Leer el resto de esta entrada »